Ante la grave crisis de precios que afecta a los cultivadores de papa en Santander, agravada por la importación del tubérculo desde Ecuador, la Gobernación anunció un plan de apoyo integral. La estrategia contempla medidas para mejorar la comercialización en centros urbanos como Bucaramanga y reducir los costos de producción para más de 2.225 familias campesinas. El plan, presentado por el gobernador Juvenal Díaz Mateus tras una mesa de trabajo con Fedepapa y alcaldes de municipios productores, se enfoca en acciones concretas y de impacto directo. Entre las medidas anunciadas se encuentran la implementación de campañas para incentivar el consumo de papa local y la inclusión del producto en mercados institucionales de emergencia. De manera específica para la capital, se instalarán lavadoras de papa en Bucaramanga para facilitar su venta y mejorar su presentación al consumidor final. Además, se diseñará un proyecto para dotar a cada municipio productor con un tractor, con el fin de disminuir los costos operativos.
Wilmer Jiménez Gómez, secretario de Agricultura, aseguró que se busca “mejorar la calidad de vida de los productores mediante acciones unificadas”, promoviendo mejores precios y circuitos cortos entre la oferta y la demanda. Por su parte, el gerente de Fedepapa, Richard Sánchez, destacó la importancia de articular la oferta institucional con las necesidades de los agricultores. Este paquete de medidas representa una respuesta coordinada del gobierno departamental para sostener a un sector agrícola vital para la economía regional.
En resumenEl plan de apoyo al sector papicultor es una respuesta gubernamental multifacética a una crisis económica, combinando asistencia técnica en el campo con estrategias de mercado en Bucaramanga para asegurar la sostenibilidad de los productores.