“En Barranquilla hay un solo foco: su gente.

La mejora de las condiciones en educación, salud y oportunidades ha generado un círculo virtuoso de confianza y prosperidad”, afirmó el mandatario. Este buen manejo financiero ha tenido un impacto tangible en las arcas del Distrito, que, según Char, ha duplicado sus niveles de recaudo en los últimos dos años. Este aumento en los ingresos propios permite a la administración fortalecer la inversión social y continuar con el desarrollo de proyectos estratégicos que mejoran la calidad de vida de los habitantes. El reconocimiento del DNP no solo valida la gestión actual, sino que también fortalece la confianza de los inversores y las entidades crediticias, lo que es fundamental para la sostenibilidad financiera a largo plazo y la capacidad de la ciudad para emprender nuevas obras. La Alcaldía reafirma que sus pilares de gobierno —calidad de vida, inversión social y crecimiento equitativo— son la guía para mantener a Barranquilla como un ejemplo de gestión pública eficiente y próspera.