Estos resultados se atribuyen a una estrategia articulada entre la Alcaldía y la Policía, así como a una tregua entre bandas criminales.
El alcalde Alejandro Char celebró los resultados a través de sus redes sociales, afirmando: “¡Barranquilla no se rinde, seguimos dándole frente a la delincuencia!”.
El balance oficial también reporta reducciones en otros delitos de alto impacto como el hurto a comercio (-62%), hurto a residencias (-31%), hurto de motocicletas (-23%) y hurto a personas (-8%).
Esta mejora en la seguridad ciudadana coincide con la tregua firmada el 2 de octubre entre las dos principales estructuras criminales de la ciudad, 'Los Costeños' y 'Los Pepes'. Este acuerdo es parte de un esfuerzo más amplio en el marco de la política de 'paz total' del Gobierno Nacional. La administración distrital subraya que la reducción de la criminalidad también es producto del fortalecimiento de la fuerza pública, con inversiones en 600 motocicletas, 70 camionetas, 55 CAI Móviles y otros equipos tecnológicos. Además, se reportó un incremento en la operatividad, con un aumento del 16% en capturas por extorsión y un 17% por homicidio. La confluencia de la presión policial y los diálogos con los grupos delictivos parece ser el factor clave detrás de esta notable, aunque potencialmente frágil, disminución de la violencia en la ciudad.








