Las piezas de la estructura fueron fabricadas en Italia por la empresa especializada Fabbri Group. El alcalde Char destacó la importancia de invertir en recreación y entretenimiento, afirmando que “invertir en turismo está generando muchos empleos en las ciudades”.

Con esta nueva atracción, la administración distrital espera duplicar el número de visitantes anuales al Gran Malecón, pasando de un millón a dos millones. Este aumento tendría un impacto directo en sectores como el transporte público, la gastronomía, el comercio y la hotelería. Se espera que la noria esté en fase de pruebas en un plazo de 45 días, convirtiéndose en “una razón más para venir a Barranquilla”.