Barranquilla se perfila como la sede designada para albergar la final de la Copa Sudamericana en 2026, un hito que marcaría la primera vez que Colombia acoge una final continental de clubes de la Conmebol en formato de partido único. La noticia cobró fuerza a partir de las declaraciones de Fernando Costa, presidente de la Federación Boliviana de Fútbol, quien, tras la reasignación de la final de 2024 de Santa Cruz de la Sierra a Asunción, afirmó que la sede boliviana buscaría la final de 2027 porque “en 2026 la final se jugará en Barranquilla”. Aunque la Conmebol aún no ha emitido un comunicado oficial, estas palabras de un alto dirigente del fútbol sudamericano han sido interpretadas como una confirmación de facto, generando gran entusiasmo en la afición colombiana.
El Estadio Metropolitano Roberto Meléndez sería el escenario para este evento histórico.
Conocido como la “casa de la Selección Colombia”, el recinto cumple con los estándares de la Conmebol gracias a su capacidad para más de 46.000 espectadores y su infraestructura, la cual será potenciada con el proyecto de remodelación anunciado por la Alcaldía. La designación de Barranquilla como sede tendría un impacto económico y turístico de gran envergadura para la ciudad, beneficiando a sectores como la hotelería, la gastronomía, el transporte y el comercio local ante la llegada de miles de visitantes extranjeros y medios de comunicación internacionales. Este evento no solo representaría un logro deportivo, sino también un reconocimiento al crecimiento del fútbol colombiano y a la capacidad de la capital del Atlántico para organizar eventos de talla mundial.
En resumenA la espera de la confirmación oficial de la Conmebol, las declaraciones de un directivo del fútbol sudamericano han posicionado a Barranquilla como la anfitriona de la final de la Copa Sudamericana 2026. Este evento histórico promete un significativo impulso económico y turístico para la ciudad, consolidando su estatus como un epicentro deportivo en el continente.