Las relaciones entre Colombia y Estados Unidos atraviesan una nueva crisis diplomática, desencadenada por la revelación de un documento en la Casa Blanca que incluye un fotomontaje del presidente Gustavo Petro como prisionero y detalla un plan para desestabilizar a su gobierno. La controversia surgió a raíz de una fotografía tomada en el Despacho Oval, donde un asesor de Donald Trump sostenía una carpeta con un documento titulado “La doctrina Trump para Colombia y el Hemisferio Occidental”. En su interior, una imagen mostraba a los presidentes Gustavo Petro y Nicolás Maduro vestidos con overoles naranjas de prisioneros estadounidenses. Este documento, elaborado por el equipo del senador republicano de origen colombiano Bernie Moreno, propone un plan de cinco puntos que incluye designar a más carteles colombianos como organizaciones terroristas, imponer sanciones a Petro y su entorno, y abrir una investigación sobre la financiación de su campaña presidencial, lo que podría llevar a su judicialización en EE.
UU.
El presidente Petro reaccionó enérgicamente, calificando el hecho como un “irrespeto brutal” y una “acción violenta para eliminar la opción política que representa mi gobierno”. Como respuesta, anunció que llamaría a consultas a su embajador en Washington, Daniel García-Peña, el paso previo a una posible ruptura de relaciones diplomáticas. Aunque la Casa Blanca retiró la imagen de su portal oficial, la revelación ha expuesto una estrategia de presión directa contra el mandatario colombiano impulsada desde círculos cercanos al poder en Washington.
En resumenLa filtración de la 'Doctrina Trump', un plan para presionar y potencialmente judicializar al presidente Gustavo Petro, evidenciado en una foto en la Casa Blanca, ha provocado una grave crisis diplomática. Colombia ha respondido llamando a consultas a su embajador, en una escalada de tensión que amenaza la relación bilateral.