UU. y ha mantenido contacto con Rusia. Moscú ha advertido a Washington que una agresión a Venezuela agravará la crisis y ha prometido apoyo militar a Maduro. Dentro de Estados Unidos, la política hacia Venezuela también es objeto de debate; el Senado ha impulsado medidas para frenar cualquier acción militar sin el aval del Congreso. Mientras tanto, informes de prensa sugieren que la Casa Blanca evalúa diversas opciones, incluyendo la posibilidad de que Maduro deje el poder a cambio de amnistía y exilio.