El paso del huracán Melissa por el Caribe ha dejado un saldo devastador de al menos 49 muertos y daños materiales estimados en 52.000 millones de dólares, afectando principalmente a Haití, Jamaica y Cuba. La catástrofe ha movilizado la solidaridad internacional, incluyendo el envío de ayuda humanitaria por parte de Colombia y Estados Unidos. Melissa, que llegó a ser categoría 5 con vientos de 298 km/h al tocar tierra en Jamaica, ha sido descrito como el más fuerte en la historia de la isla, destruyendo el 90% de su territorio y dejando a tres cuartas partes del país sin electricidad ni comunicación. El primer ministro declaró a Jamaica como “zona catastrófica”.
Haití ha sido el país más golpeado en número de víctimas, con reportes que varían entre 23 y 30 fallecidos, muchos de ellos niños, debido al desbordamiento de ríos. En Cuba, especialmente en Santiago, se reportan “daños cuantiosos” en viviendas e infraestructura, con millones de personas sin electricidad.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ya ha enviado 2,6 toneladas de suministros médicos a Cuba y prepara 5,5 toneladas adicionales para Jamaica.
Por su parte, el presidente Gustavo Petro confirmó el envío de asistencia humanitaria desde Colombia a Jamaica y Cuba, mientras que Estados Unidos también anunció que brindará apoyo. A pesar de que el huracán se ha debilitado a categoría 1 y se aleja del territorio colombiano, el IDEAM mantiene la vigilancia por posibles nuevos ciclones en la región.
En resumenEl huracán Melissa ha causado una tragedia humanitaria en el Caribe, con un alto número de víctimas mortales y una destrucción masiva en Haití, Jamaica y Cuba. La respuesta internacional está en marcha para atender a los damnificados, mientras la región permanece en alerta ante una temporada de huracanes activa.