El presidente Noboa ha calificado a los magistrados como “enemigos del pueblo” y ha liderado protestas en su contra. La convocatoria a la consulta ha intensificado el descontento social. Organizaciones indígenas han convocado a un paro nacional en rechazo a la eliminación de subsidios al diésel, una medida con la que el gobierno espera ahorrar mil millones de dólares. Las protestas se han tornado violentas, con bloqueos de vías e incendios. Noboa ha respondido con dureza, desplazándose al epicentro de las manifestaciones y acusando a la banda criminal Tren de Aragua de financiar las protestas. “Hay terroristas que hacen parte de las protestas”, declaró. Las organizaciones indígenas han negado estas acusaciones y han denunciado represión y censura, incluyendo el congelamiento de cuentas bancarias y la salida del aire de un canal de televisión comunitario.