El propio Milei reconoció la “clara derrota” y prometió una “profunda autocrítica”, aunque aseguró que su gestión “no se va a modificar, sino que se va a redoblar”.

Como primera medida, ordenó la formación de “mesas políticas” para reevaluar la estrategia, una de ellas liderada por él mismo y figuras clave de su gobierno. El triunfo peronista, celebrado por la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, posiciona al gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, como una figura presidencial potente para 2027. Para analistas como Sergio Berensztein y Lara Goyburu, este resultado abre la posibilidad del surgimiento de una tercera alternativa política, mientras que para otros, como Diana Galviz, demuestra un claro rechazo a las políticas de ajuste del gobierno libertario. La elección fue considerada un barómetro clave de cara a los comicios nacionales de octubre.