Esta medida de presión busca forzar a Irán a volver a la mesa de diálogo tras la suspensión de su cooperación con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). En una carta oficial enviada a las Naciones Unidas, el grupo E3 declaró su disposición a activar el mecanismo de “snapback”, una cláusula del acuerdo nuclear de 2015 (JCPOA) que permite a cualquiera de los firmantes originales reinstaurar las sanciones de la ONU sin necesidad de una nueva votación en el Consejo de Seguridad. La advertencia se produce después de que Irán suspendiera su cooperación con el OIEA, tras un conflicto de 12 días con Israel que incluyó ataques a instalaciones nucleares iraníes. La medida europea busca presionar a Teherán para que revierta su postura y regrese a un diálogo diplomático constructivo.

Hasta el momento, Irán no ha emitido una respuesta oficial al ultimátum.

Sin embargo, figuras como el exministro de Relaciones Exteriores, Manouchehr Mottaki, han advertido que si se activa el “snapback”, Teherán podría retirarse del Tratado de No Proliferación Nuclear (NPT), un paso que tendría graves implicaciones para la seguridad global y podría desencadenar una nueva fase de confrontación en Oriente Medio.