Las negociaciones para alcanzar un alto el fuego en la Franja de Gaza fracasaron esta semana, luego de que Estados Unidos e Israel decidieran retirar a sus equipos negociadores de Catar. Ambas delegaciones culparon directamente a Hamás, acusando al grupo de falta de voluntad y de actuar con una “postura egoísta” que sabotea cualquier posibilidad de paz. El enviado especial de Estados Unidos, Steve Witkoff, declaró que la última respuesta de Hamás demostraba “claramente su falta de voluntad de alcanzar un alto el fuego”. Tras el retiro, Washington anunció que buscará “opciones alternas” para rescatar a los rehenes israelíes.
Por su parte, la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ordenó el regreso de su equipo para “más consultas” tras recibir la propuesta de Hamás, la cual fue considerada desalentadora. Netanyahu afirmó que, aunque sigue trabajando por la liberación de los rehenes, no aceptará condiciones que pongan en riesgo la seguridad de Israel. Según una fuente palestina, la contrapropuesta de Hamás incluía enmiendas sobre la entrada de ayuda humanitaria y garantías sobre el fin definitivo de la guerra. El estancamiento de las conversaciones agrava la ya severa crisis humanitaria en Gaza, donde la ONU y más de 100 ONG denuncian una hambruna extrema, con reportes de decenas de muertes por desnutrición, especialmente entre niños.
En resumenEl retiro de Estados Unidos e Israel de las negociaciones en Catar deja las esperanzas de una tregua en Gaza en un punto muerto, agudizando la crisis humanitaria mientras la comunidad internacional observa un fracaso diplomático de grandes proporciones.