Entre las razones específicas citadas en los documentos se mencionan informes sobre el "consumo de drogas entre altos miembros del Gobierno" y "violaciones al debido proceso e irregularidades judiciales en el caso contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez". La propuesta de recorte presupuestal ha sido impulsada por figuras como el representante republicano Mario Díaz-Balart, quien ha declarado que el presidente Petro "parece estar empecinado en destruir la relación Colombia - Estados Unidos". Según el proyecto, los 209 millones de dólares se distribuirían en 103 millones para la lucha contra el narcotráfico, 67 millones para seguridad nacional y 38 millones para las fuerzas armadas. La decisión final aún depende de la aprobación en el pleno de la Cámara, pero la iniciativa ya marca un punto de inflexión en la cooperación histórica entre ambos países, tradicionalmente centrada en la seguridad y la lucha antinarcóticos.
