Estos resultados superaron ampliamente las expectativas del mercado y provocaron un alza en las acciones de la compañía. El director ejecutivo, Jensen Huang, descartó las preocupaciones sobre una burbuja de IA, dudas que habían presionado las acciones de la empresa a la baja en noviembre. El optimismo se extendió a los mercados globales, con los futuros de Wall Street y las bolsas asiáticas y europeas abriendo al alza tras el anuncio.

Nvidia también anunció acuerdos estratégicos, incluyendo un compromiso con OpenAI para incorporar sus sistemas en la infraestructura de próxima generación de la organización. Además, la compañía informó que destinó US$37.000 millones a recompras de acciones y dividendos en los primeros nueve meses de su año fiscal.