Los resultados del segundo trimestre del año son particularmente reveladores.
Tigo y WOM emergieron como los grandes perdedores, con resultados netos negativos significativos.
Tigo perdió cerca de 176.000 líneas, mientras que WOM registró una salida neta de aproximadamente 110.000 usuarios.
Estas cifras representan variaciones negativas del 341% y 72,8% respectivamente, en comparación con el mismo trimestre del año anterior, lo que indica una aceleración en la fuga de sus clientes. En contraste, Movistar se posicionó como el principal ganador, con un resultado neto positivo de 182.400 operaciones, logrando atraer a 67.600 usuarios de WOM, 40.400 de Tigo y 63.400 de Claro. Por su parte, Claro, aunque también perdió usuarios hacia Movistar, fue el principal destino para quienes abandonaron Tigo (60,1%) y Movistar (51,2%), manteniendo un resultado neto positivo de 122.900 operaciones. Estos movimientos reconfiguran el panorama competitivo y demuestran la agresividad de las estrategias comerciales para atraer a los usuarios de la competencia.