Julián Domínguez Rivera anunció su retiro de la presidencia de la Confederación Colombiana de Cámaras de Comercio (Confecámaras) tras más de 14 años en el cargo, decisión que se hará efectiva el 5 de octubre. La Junta Directiva del gremio designó a Nicolás Botero-Páramo Gaviria, actual presidente de Fedeseguridad, como su sucesor. La salida de Domínguez se produce en un contexto particular, apenas dos días después de que la Superintendencia de Sociedades decidiera no archivar una investigación administrativa contra Confecámaras por el presunto manejo irregular de recursos públicos. La indagación se centra en los fondos del Registro de Garantías Mobiliarias, que suman cerca de $18.000 millones anuales. La Supersociedades ordenó a la entidad aportar más soportes documentales, indicando que la información entregada era incompleta. A esto se suma que la Contraloría General de la República incluyó recientemente a Confecámaras en la lista de entidades sujetas a control fiscal.
En una entrevista, Domínguez atribuyó los señalamientos a una “campaña de infamias liderada por personas cercanas al gobierno Petro” y afirmó que su salida fue una decisión personal y concertada.
Durante su gestión, se destacan la consolidación de la gobernanza empresarial con la Ley 1727 de 2014 y la transformación tecnológica del gremio, con la digitalización del 70% de las matrículas mercantiles. Su sucesor, Nicolás Botero-Páramo, es abogado y politólogo con experiencia como viceministro de Justicia y asesor presidencial.
En resumenEl presidente de Confecámaras, Julián Domínguez, anunció su retiro tras 14 años, en un momento en que la entidad enfrenta investigaciones de la Superintendencia de Sociedades y la Contraloría. La Junta Directiva designó a Nicolás Botero-Páramo Gaviria como su reemplazo a partir del 5 de octubre.