Esta situación habría resultado en que los consumidores pagaran un valor superior al debido por los productos adquiridos a crédito. Adicionalmente, la entidad de control detectó que los contratos de financiación de Flamingo presuntamente carecían de información mínima obligatoria para que los clientes tomaran decisiones informadas. Entre los datos faltantes se encontrarían la descripción detallada del bien, el desglose de las tasas de interés remuneratoria y moratoria expresadas como interés efectivo anual, y la tasa máxima legal vigente al momento de la firma del acuerdo. La SIC advirtió que estas omisiones habrían impedido a los consumidores conocer el costo real del crédito que estaban asumiendo.

De comprobarse las conductas, Almacenes Flamingo podría enfrentar multas de hasta 2.000 salarios mínimos mensuales legales vigentes (SMMLV) y otras sanciones, como el cierre temporal de sus establecimientos.