Omar Suárez, de Aval Casa de Bolsa, y Juan Camilo Buendía, de Acciones & Valores, coinciden en que la desvalorización de la acción de Ecopetrol es mayor que la de sus competidores regionales y globales. Suárez señala que la principal presión proviene de la percepción de los inversionistas sobre el gobierno corporativo. “El presidente de Ecopetrol está sujeto a investigaciones, se han cambiado reglas para la conformación de la junta directiva y la caída de un negocio en Estados Unidos generó desconfianza en el mercado”, afirmó.

Buendía, por su parte, apunta a un deterioro en las cifras corporativas, con ingresos y utilidades cayendo trimestre tras trimestre, márgenes netos que pasaron de más del 20 % a menos del 10 %, y un aumento del endeudamiento.