Ríos, quien jugó 66 minutos, demostró seguridad, precisión en los pases y una gran movilidad en el mediocampo. Su participación fue clave en el segundo gol del Benfica, cuando un potente disparo suyo se desvió en un defensor rival, resultando en un autogol. Aunque oficialmente la anotación no fue suya, la jugada nació de su iniciativa ofensiva. Un momento destacado del partido fue la reacción del capitán del equipo, el argentino Nicolás Otamendi, quien defendió a Ríos tras una dura falta recibida. Este gesto fue interpretado como una señal del respaldo que el colombiano ya genera dentro del plantel, fortaleciendo su integración. El debut de Ríos llega tan solo cuatro días después de su presentación oficial, lo que evidencia la confianza del técnico Bruno Lage en sus capacidades. Con esta victoria, el Benfica se prepara para enfrentar al Sporting de Lisboa en la final de la Supercopa de Portugal el próximo 31 de julio. El buen inicio de Ríos alimenta las expectativas sobre su impacto en el fútbol europeo.
