La acción fue motivada por denuncias de la comunidad sobre un canino que se encontraba amarrado, sin su esquema de vacunación y en un entorno inadecuado.
Según los informes, las autoridades ya habían realizado visitas previas al lugar para emitir recomendaciones al tenedor del animal, pero al constatar que las condiciones no habían mejorado, se procedió con la aprehensión material preventiva. Este procedimiento marca un hito en la ciudad, demostrando la capacidad de las autoridades para intervenir de manera efectiva cuando se vulneran las condiciones mínimas de bienestar animal. El canino fue puesto bajo custodia de la entidad municipal para recibir una valoración médica-veterinaria completa y el seguimiento legal correspondiente. Este caso no solo resalta la importancia de la nueva legislación, sino que también subraya el papel fundamental de la participación ciudadana a través de la denuncia para activar los mecanismos de protección y garantizar que la tenencia responsable de animales sea una norma exigible en la comunidad.








