Paralelamente, la jornada sirve para desmitificar percepciones erróneas sobre el comportamiento felino.

Expertos señalan que, contrario a la creencia popular de que son seres solitarios, los gatos son una especie “social facultativa”, capaces de establecer vínculos afectivos profundos tanto con otros felinos como con sus cuidadores, mostrando un apego seguro similar al de los perros.

Las campañas educativas asociadas a esta fecha abordan temas cruciales para el bienestar animal, como la importancia de la esterilización para controlar la sobrepoblación, la vacunación para prevenir enfermedades, el enriquecimiento ambiental para evitar el estrés y una nutrición adecuada para prevenir patologías comunes como la enfermedad renal crónica. En definitiva, el Día Internacional del Gato se consolida como un recordatorio de que la tenencia de una mascota implica una responsabilidad continua que va más allá de la alimentación y requiere atención médica, estimulación emocional y un entendimiento profundo de sus necesidades.