Entre sus principales mejoras técnicas, los artículos destacan una pantalla LCD de 7.9 pulgadas con resolución de 1920x1080, soporte para HDR10 y una tasa de refresco de hasta 120 fps en juegos compatibles. Cuando se conecta al dock, la consola es capaz de alcanzar una resolución de 4K.
El almacenamiento interno se ha cuadruplicado, pasando a 256 GB, aunque varios análisis señalan que este espacio sigue siendo insuficiente para el tamaño de los juegos modernos.
Ante esto, Nintendo ha confirmado que la consola no soportará discos duros externos, posicionando las tarjetas microSD Express como la solución oficial de expansión, las cuales ofrecen velocidades de hasta 985 MB/s. Una crítica recurrente es la duración de la batería, que se mantiene entre 2 y 6.5 horas, similar a la del modelo original, lo cual es visto como un punto débil considerando el aumento de potencia.
El lanzamiento viene acompañado de paquetes con juegos como 'Mario Kart World' y 'Leyendas Pokémon Z-A'. Además, la actualización de firmware 21.0.0 modificó la interfaz para facilitar el canje de juegos digitales y, según reportes, causó problemas de compatibilidad con algunos docks de terceros, aunque Nintendo afirmó que no era su intención bloquearlos.













