Estos sistemas conversacionales van más allá de ser un simple soporte operativo. Su capacidad les permite comparar precios, analizar reseñas de productos, personalizar recomendaciones e incluso ejecutar compras completas de manera autónoma, convirtiéndose en un motor de conexión y fidelización.
El contexto colombiano es ideal para esta transformación, dado el crecimiento sostenido del consumo digital. En 2024, durante el Black Friday, la DIAN registró transacciones por $1,1 billones solo en el viernes de promociones, un 31,9 % más que el año anterior. Las soluciones basadas en IA permiten a los minoristas integrar sistemas que aprenden del historial de navegación y los patrones de búsqueda de cada cliente, facilitando decisiones de compra más rápidas y seguras. Sin embargo, el auge de estos agentes inteligentes también plantea desafíos significativos relacionados con la privacidad, la transparencia y la ética en el uso de los datos. Por ello, se recomienda a las empresas adoptar marcos de gobernanza claros y mecanismos de supervisión para asegurar un uso responsable de la IA y proteger la confianza del consumidor.











