Este avance demuestra por primera vez un algoritmo cuántico verificable con aplicaciones prácticas.

Los investigadores de Google afirman que esta capacidad podría revolucionar áreas críticas como el descubrimiento de nuevos fármacos, al permitir la simulación precisa de interacciones moleculares para crear medicamentos personalizados. Otros campos de aplicación incluyen el diseño de materiales avanzados más resistentes y sostenibles, la optimización energética y el fortalecimiento de la ciberseguridad. Aunque la tecnología aún se encuentra en una fase experimental, Google prevé que en los próximos años los procesadores cuánticos se integrarán con sistemas de inteligencia artificial para resolver problemas complejos que hoy desafían a la ciencia y la ingeniería.