Incorporan una pequeña pantalla a color en el lente derecho que permite leer mensajes, ver mapas, traducir conversaciones en tiempo real y realizar videollamadas.

Su principal innovación es una pulsera neural que detecta los impulsos eléctricos de los músculos de la mano, permitiendo al usuario controlar las gafas con gestos sutiles, como escribir en el aire. Según Zuckerberg, esta tecnología busca que las personas mantengan la "presencia" en su entorno, algo que los teléfonos a menudo interrumpen. Sin embargo, la presentación en vivo del dispositivo tuvo fallos técnicos; en un intento de demostrar una videollamada, la función no operó correctamente, lo que generó dudas sobre la madurez de la tecnología.

Además de las Display, Meta lanzó las Ray-Ban Meta Gen 2 (379 dólares), una actualización del modelo anterior con mejor cámara y batería, y las Oakley Meta Vanguard (499 dólares), enfocadas en deportistas. Esta fuerte inversión, que supera los 70 mil millones de dólares en la división de realidad virtual y aumentada desde 2020, evidencia la estrategia a largo plazo de Meta para liderar la próxima era de la computación personal.