Con un precio de 499 dólares, este modelo busca integrar la inteligencia artificial y la conectividad en la rutina de los atletas.
Las Vanguard se diferencian por su enfoque en el rendimiento.
Se conectan con plataformas populares de seguimiento de actividad como Strava y Garmin, permitiendo a los usuarios registrar sus entrenamientos directamente desde las gafas. La aplicación Meta AI incluirá una nueva sección de 'entrenamientos' para visualizar detalles de la actividad, junto con fotos y videos capturados durante el ejercicio, y ofrecerá un resumen generado por IA de cada sesión. Pensando en las condiciones de uso, Oakley y Meta han equipado las Vanguard con altavoces más grandes y potentes, diseñados para que la música sea audible incluso en situaciones de mucho viento, como un paseo en bicicleta. Este modelo también cuenta con la mayor duración de batería de toda la línea de gafas de Meta, alcanzando aproximadamente nueve horas con una sola carga. El diseño ha sido cuidadosamente adaptado para el uso deportivo; los botones de control se encuentran en el borde inferior de la patilla, lo que facilita su acceso incluso cuando el usuario lleva puesto un casco. Esta colaboración con Oakley posiciona a Meta en el competitivo mercado de los wearables de alto rendimiento, compitiendo con marcas especializadas en tecnología deportiva.