Este lanzamiento representa un salto cualitativo frente a modelos anteriores de la compañía, que se limitaban a incorporar cámaras y altavoces.

Las Ray-Ban Display, con un precio de 799 dólares, permiten a los usuarios leer mensajes, realizar videollamadas, ver Reels de Instagram, seguir indicaciones en mapas y obtener traducciones en tiempo real. La innovación más destacada es una pulsera neural que, mediante electromiografía, detecta los impulsos eléctricos de los músculos de la mano, permitiendo controlar las gafas con gestos sutiles. Mark Zuckerberg, CEO de Meta, afirmó que con este sistema ya es posible alcanzar una velocidad de escritura de 30 palabras por minuto. El objetivo, según el director de producto Chris Cox, es que la tecnología "desaparezca" y permita a los usuarios mantenerse presentes en su entorno, algo que, según Zuckerberg, "el teléfono nos roba". Sin embargo, la presentación en vivo no estuvo exenta de problemas; un fallo técnico impidió a Zuckerberg recibir una videollamada, lo que generó dudas sobre la fiabilidad del producto en su estado actual. Este proyecto se enmarca en la multimillonaria inversión de Meta en su división de realidad virtual y aumentada, que ha superado los 70 mil millones de dólares desde 2020, una apuesta de alto riesgo para liberarse de la dependencia de los ecosistemas de Apple y Google.