Este diseño ultradelgado está pensado para ofrecer comodidad durante largas sesiones de juego. Su pantalla es una AMOLED curva de 6,78 pulgadas con resolución 1.5K, una tasa de refresco de 144 Hz y un brillo máximo de 4.500 nits, características propias de gamas más altas. En su interior, el dispositivo integra el procesador MediaTek Helio G200, que permite alcanzar hasta 90 FPS en títulos como Free Fire, y está acompañado de 8 GB de RAM, expandibles a 16 GB mediante RAM virtual. Uno de sus principales atractivos es su precio de lanzamiento en Colombia de 899.900 pesos, lo que lo convierte en una de las propuestas más accesibles del segmento gamer. Sin embargo, los artículos señalan un punto a considerar: su sistema de cámaras.

Aunque el módulo trasero aparenta tener tres lentes, en realidad se reduce a un único sensor principal de 50 MP, lo que limita su versatilidad fotográfica en comparación con otros competidores que ofrecen lentes gran angular o telefoto.