Añadió que continuar en ese entorno era “insostenible para este proyecto” y que su salud mental y relaciones personales eran su prioridad.

A pesar de este lamentable suceso, se ha confirmado que la emisión de la serie continuará con normalidad cada domingo. Este incidente pone de relieve un problema creciente en las comunidades de fanáticos, donde la pasión se transforma en acoso, afectando directamente a los creadores y generando un ambiente hostil que perjudica tanto a la industria como a la propia obra.