El presentador Jimmy Kimmel regresó a su programa ‘Jimmy Kimmel Live!’ tras una controvertida suspensión de una semana, con un emotivo monólogo que defendió la libertad de expresión y batió récords de audiencia en YouTube. La suspensión del programa por parte de la cadena ABC se produjo después de que Kimmel hiciera comentarios sobre el asesinato del activista conservador Charlie Kirk, lo que generó presiones por parte de la administración Trump y operadores de medios como Sinclair y Nexstar, que decidieron no emitir el programa. En su monólogo de regreso, que ya supera los 16 millones de visualizaciones en YouTube, Kimmel se mostró visiblemente afectado, aclaró que su intención no fue ofender y expresó su admiración por la viuda de Kirk.
Sin embargo, mantuvo un tono crítico hacia el presidente Donald Trump, a quien reprochó haber celebrado la suspensión del programa.
“Un gobierno que amenaza con silenciar a un comediante que no le gusta es antiestadounidense”, afirmó Kimmel.
Agradeció también a figuras conservadoras como Ben Shapiro y Ted Cruz por defender su derecho a la libre expresión, a pesar de sus diferencias ideológicas.
El regreso del programa no fue total, ya que Sinclair y Nexstar mantuvieron su boicot, dejando sin acceso a cerca del 25 % de la audiencia tradicional. Este episodio ha puesto de relieve la creciente politización de los programas de ‘late-night’ y el poder de las plataformas digitales como YouTube para eludir la censura de los canales tradicionales y medir el apoyo del público.
En resumenLa controversia en torno a Jimmy Kimmel y su exitoso regreso en plataformas digitales subraya la tensa relación entre la comedia, la política y la libertad de prensa en Estados Unidos, demostrando cómo el público digital puede convertirse en un factor clave de respaldo frente a las presiones políticas y corporativas.