Redford entendió antes que muchos que las historias auténticas y arriesgadas eran un nicho valioso que la gran industria de Hollywood a menudo ignoraba. Además de su faceta como cineasta, Redford fue un firme activista medioambiental, utilizando su fama para abogar por la conservación de la naturaleza y promover la conciencia ecológica. Su muerte, ocurrida el 16 de septiembre de 2025, fue lamentada por figuras de todo el espectro político y cultural, desde Donald Trump hasta Meryl Streep, quienes reconocieron su impacto perdurable en el cine y la cultura.
