Defendió a Alcocer como “una mujer libre, no gasta ni un peso del erario” y aseguró que el intento de “destruir mi familia para debilitarme no funciona”.

Petro también defendió la compra de los Gripen, afirmando que la negociación fue transparente, tomó todo su gobierno y se eligió la mejor opción técnica sobre ofertas de F-16 de tercera mano. Incluso relató haber advertido personalmente al dueño de Saab sobre la prohibición de comisiones. Sin embargo, un análisis del portal El Expediente califica el contrato como un “caso de riesgo extremo”, activando “todas las alertas del manual global de corrupción en defensa” debido al sector, los antecedentes de Saab en otros países y la presencia de la primera dama sancionada en el país vendedor.