El despliegue del portaaviones USS Gerald R. Ford, el más avanzado de la flota estadounidense, subraya la magnitud de la operación, proyectando una capacidad de fuerza abrumadora en la región. Paralelamente, el Departamento de Estado designó al 'Cartel de los Soles', vinculado por EE.

UU. a altos mandos del gobierno venezolano, como organización terrorista extranjera, lo que otorga a Washington un marco legal más amplio para actuar.

En este contexto, Trump declaró que estaría “orgulloso” de atacar objetivos en Colombia y no descartó una intervención en México, aunque también abrió una puerta a un posible diálogo con Nicolás Maduro, afirmando que “ellos quieren hablar”. El presidente Gustavo Petro respondió a las amenazas de Trump, destacando la destrucción de más de 10.000 laboratorios durante su gobierno y criticando la nueva postura estadounidense, lo que ha generado una notable fricción diplomática y la suspensión del intercambio de inteligencia entre ambos países.