Este grupo mantiene su control sobre rutas de narcotráfico, extorsión y minería ilegal.

Por su parte, el ELN creció un 3%, alcanzando los 6.450 miembros, con fuerte presencia en regiones como Catatumbo, Arauca y Chocó.

Las disidencias de las FARC también muestran una expansión notable: la estructura de ‘Iván Mordisco’ sumó 640 nuevos miembros, llegando a un total de 3.919 integrantes, mientras que el bloque de ‘Calarcá’ aumentó en 387 personas, totalizando 2.802. En contraste, la Segunda Marquetalia, liderada por ‘Iván Márquez’, habría sufrido un debilitamiento, pasando de 1.537 a 532 integrantes.

El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, atribuyó este crecimiento a las economías ilegales y a la presión social en los territorios.

La Defensora del Pueblo, Iris Marín, advirtió que “esta gobernanza criminal podría incidir en los procesos electorales”.