Según su testimonio, de este tipo de alianzas “hizo parte el senador y precandidato conservador, Efraín Cepeda”, así como otros congresistas y empresarios como Julio Gerlein.
Ashton afirmó que ayudaban a que “del presupuesto nacional se aprobaran partidas que terminaron financiando proyectos manejados por el Frente José Pablo Díaz con la Alcaldía de Barranquilla.
Con esos recursos se nutrían para seguir delinquiendo”.
Además, mencionó al ministro Armando Benedetti, de quien aseguró fue uno de los que “mayor promoción hacía de la aprobación de artículos” de la Ley de Justicia y Paz que eran “fundamentales para las AUC”, como los relacionados con la sedición y la alternatividad penal. La JEP, tras considerar que los aportes de Ashton son clave para el esclarecimiento de la parapolítica, decidió mantener su sometimiento y remitir copias de su declaración a la Corte Suprema de Justicia y a la Fiscalía para que se investigue a los mencionados.
Por su parte, el senador Cepeda negó categóricamente cualquier vínculo con el paramilitarismo.












