Una decisión del Tribunal Superior de Bogotá revocó la medida cautelar que permitía la realización de la consulta interna del Pacto Histórico, programada para el 26 de octubre, generando un limbo jurídico y una fuerte reacción por parte del oficialismo. El fallo pone en duda la viabilidad del mecanismo con el que la coalición de gobierno pretendía elegir a su candidato presidencial entre Carolina Corcho, Iván Cepeda y Daniel Quintero. La controversia se originó por una resolución del Consejo Nacional Electoral (CNE) que había aceptado la fusión del Pacto Histórico en un partido único, pero excluyendo a movimientos clave como la Colombia Humana, del presidente Gustavo Petro, y Progresistas, de la senadora María José Pizarro, debido a procesos sancionatorios pendientes. Una tutela presentada por Carolina Corcho y Gustavo Bolívar había logrado una medida cautelar que suspendía temporalmente dicha exclusión, permitiendo la inscripción de los precandidatos. Sin embargo, al fallar de fondo, el Tribunal Superior negó la tutela, argumentando que el CNE aplicó correctamente la normativa electoral y no vulneró derechos fundamentales. La reacción del presidente Petro fue inmediata, calificando la decisión como un “golpe político contra la democracia premeditado”.
En su cuenta de X, afirmó: “No quieren competir por el voto sino por la trampa”.
De manera similar, otros líderes del Pacto, como Gustavo Bolívar, insistieron en que el proceso seguirá adelante: “La consulta del Pacto Histórico, va porque va.
La democracia es inatajable”. A pesar del revés judicial, el registrador nacional, Hernán Penagos, confirmó que la organización de la consulta continúa, ya que no ha sido notificado oficialmente de una decisión que la suspenda. Tras el fallo, el presidente convocó a los precandidatos a la Casa de Nariño para evaluar las opciones legales y políticas, reafirmando la intención de mantener en pie el proceso electoral.
En resumenLa decisión del Tribunal Superior de Bogotá de revocar la medida cautelar que amparaba la consulta del Pacto Histórico ha creado una profunda incertidumbre jurídica. A pesar de esto, los líderes de la coalición, incluyendo al presidente Petro, han manifestado su intención de continuar con el proceso, desafiando el fallo y elevando la tensión política de cara a las elecciones de 2026.