El nombre 'Trionda' es un acrónimo que fusiona 'Tri', por los tres países anfitriones, y la palabra española 'onda', simbolizando unidad y movimiento.

Su diseño visual combina los colores de las banderas de las tres naciones (rojo, verde y azul) e integra elementos representativos como la hoja de arce canadiense, el águila mexicana y las estrellas estadounidenses. Técnicamente, el balón presenta una construcción innovadora de cuatro paneles geométricos que mejoran su aerodinámica y estabilidad en vuelo. Sin embargo, su avance más significativo es la tecnología de 'balón conectado', que incluye un sensor de movimiento de 500 Hz. Este sistema enviará datos en tiempo real a la sala del VAR, facilitando decisiones cruciales, especialmente en jugadas de fuera de juego. El lanzamiento de 'Trionda' reafirma la histórica alianza entre Adidas y la FIFA, que se remonta a 1970.

Este patrocinio, valorado en aproximadamente 80 millones de dólares anuales, convierte al balón en una pieza central de marketing. Se estima que en un año mundialista, la producción y venta de balones, en su mayoría réplicas, puede alcanzar entre 15 y 20 millones de unidades a nivel global, consolidando el esférico como un símbolo icónico y un negocio de gran impacto para la marca alemana.