El Gobierno colombiano, a través del Ministerio de Defensa, ha presentado los prototipos de un nuevo fusil de asalto 100 % de fabricación nacional, diseñado para reemplazar al fusil Galil de origen israelí. Este desarrollo, a cargo de la Industria Militar (Indumil), marca un paso significativo hacia la autonomía estratégica del país en materia de defensa, impulsado por la reciente crisis diplomática con Israel. El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, reveló que el proyecto se encuentra en una fase avanzada, con 10 prototipos ya fabricados desde su inicio en 2022. El nuevo fusil, que aún no tiene nombre oficial, está construido principalmente con polímeros, lo que lo hace más liviano que el Galil, con un peso de 3,5 kg con el cargador vacío.
Además, su costo de producción será aproximadamente un 15 % menor.
Una de las ventajas más importantes del nuevo diseño es la capacidad de fabricar los cañones localmente, una pieza clave que, junto con la mira nocturna, siempre tuvo que ser importada de Israel para la producción del Galil en Colombia. Indumil ya está en proceso de adquirir la maquinaria necesaria para la producción interna de estos componentes.
El proyecto también incluye el desarrollo de un nuevo subfusil en calibre 9 mm. Esta iniciativa no solo representa una ventaja logística y estratégica, sino que también podría generar ahorros significativos, reducir los tiempos de mantenimiento y, fundamentalmente, eliminar la dependencia de suministros extranjeros en un área crítica para la seguridad nacional.
En resumenEn un movimiento hacia la soberanía en defensa, Colombia ha desarrollado un nuevo fusil de asalto de fabricación propia para sustituir al Galil. Este avance, motivado por tensiones diplomáticas con Israel, permitirá al país producir componentes clave localmente, fortaleciendo su independencia militar y optimizando recursos.