Además, su costo de producción será aproximadamente un 15 % menor.

Una de las ventajas más importantes del nuevo diseño es la capacidad de fabricar los cañones localmente, una pieza clave que, junto con la mira nocturna, siempre tuvo que ser importada de Israel para la producción del Galil en Colombia. Indumil ya está en proceso de adquirir la maquinaria necesaria para la producción interna de estos componentes.

El proyecto también incluye el desarrollo de un nuevo subfusil en calibre 9 mm. Esta iniciativa no solo representa una ventaja logística y estratégica, sino que también podría generar ahorros significativos, reducir los tiempos de mantenimiento y, fundamentalmente, eliminar la dependencia de suministros extranjeros en un área crítica para la seguridad nacional.