Criticó la designación de una fiscal de apoyo, María Isabel Ramírez, afirmando: “Tengo los conocimientos y la experiencia suficiente”. Además, relató que fue citada a una reunión el 18 de septiembre por dos direcciones especializadas donde tuvo que exponer avances del caso sin información previa, una acción que, según ella, pone en riesgo los principios de celeridad, objetividad y debido proceso. Esta denuncia surge en un momento crítico del proceso, ya que a principios de septiembre se conoció que Nicolás Petro será imputado por dos nuevos delitos presuntamente cometidos como diputado del Atlántico: celebración de contratos y falsedad en documento público. Este segundo proceso judicial es distinto al del presunto financiamiento irregular de la campaña presidencial de su padre y podría afectar la libertad condicional de la que goza actualmente mientras avanza el juicio por lavado de activos. El escándalo interno en la Fiscalía añade una capa de complejidad a un caso que ya es central en el panorama político nacional.