En Cajibío, la comunidad reportó un ataque prolongado, con una residente afirmando: “Los que tengan contactos con la Policía y con el Ejército, pedir que manden refuerzos porque yo creo que están acabando con la policía, están pidiendo que se entreguen”.

En este municipio se reportó un civil muerto y dos policías heridos. La violencia se extendió a la capital, Popayán, donde se registró una masacre en un bar que dejó tres hombres muertos. Según Indepaz, esta es la sexta masacre en el Cauca y la número 58 en el país en lo corrido del año.

La Policía Metropolitana de Popayán informó que dos de las víctimas tenían antecedentes judiciales por delitos como violencia intrafamiliar y porte ilegal de armas. Adicionalmente, la movilidad en la región fue interrumpida por la presunta instalación de un cilindro bomba con emblemas de las Farc en la vía Panamericana, a la altura de Mondomo, en Santander de Quilichao, lo que generó pánico y detuvo el tráfico entre Popayán y Cali.