Las empresas sancionadas, que operan como mayoristas e Instituciones Prestadoras de Salud (IPS), son Distribuidora Hospitalaria de Cúcuta S.A.S., Fabilu S.A.S.

y Fabisalud IPS S.A.S.

Las investigaciones, realizadas en Cúcuta y Cali, revelaron que estas compañías excedieron sistemáticamente los precios regulados por la Comisión Nacional de Precios de Medicamentos y Dispositivos Médicos. Uno de los casos más graves involucra a Distribuidora Hospitalaria de Cúcuta, que comercializó 47 medicamentos con sobrecostos.

Por ejemplo, el medicamento Tisseel, cuyo precio máximo de venta es de $585.368, fue vendido en $4.750.000, un incremento del 7.000,93 %. Otro caso fue el de Actilyse, que pasó de un precio regulado de $1.691.122 a ser comercializado en $11.601.138. Por su parte, Fabilu S.A.S., tanto en su rol de mayorista como de IPS a través de la Clínica Colombia ES, vendió fármacos como Clexane y Verapamilo con sobreprecios significativos. Fabisalud IPS S.A.S., propietaria de la Clínica Cristo Rey, también fue sancionada por incrementos de hasta el 100 % en medicamentos como Symbicort. La Superintendencia advirtió que “el régimen de control directo de precios de medicamentos y dispositivos médicos es una medida esencial para proteger el interés general”, y recalcó que estas acciones garantizan un uso eficiente de los recursos públicos. Las sanciones son de primera instancia y las empresas pueden interponer recursos de reposición y apelación.