Sin embargo, no logró cumplir con el acuerdo pactado con sus acreedores.
Según la Supersociedades, la empresa incumplió de manera persistente sus obligaciones con entidades como la DIAN y Colpensiones, además de acumular deudas por impuesto al consumo y gastos de administración. Con corte a junio de 2025, Don Jediondo reportaba activos por $25.601 millones frente a pasivos de $25.580 millones, evidenciando una situación financiera insostenible.
El superintendente Billy Escobar Pérez señaló que se agotaron todos los mecanismos legales de recuperación y, ante la imposibilidad de la empresa para superar sus dificultades, se ordenó la liquidación para proteger los activos restantes y garantizar los derechos de los acreedores y sus 183 trabajadores. El humorista Pedro González, conocido como 'Don Jediondo' y fundador de la marca, había confesado previamente el impacto personal de la crisis, admitiendo haber sufrido depresión y ataques de pánico debido a las dificultades financieras y las críticas en redes sociales. El cierre de la cadena marca el fin de un icónico negocio gastronómico en el país.