Las farmacéuticas Novo Nordisk y Pfizer han entrado en una guerra de ofertas por la adquisición de la 'startup' biotecnológica Metsera, especializada en tratamientos para la obesidad. La disputa, que ha llegado a los tribunales, evidencia la intensa competencia por dominar el lucrativo mercado de los medicamentos para adelgazar. La contienda se intensificó cuando Novo Nordisk presentó una oferta de hasta 8.500 millones de dólares por Metsera, la cual incluye un pago inicial de 6.000 millones de dólares y pagos adicionales condicionados a la consecución de ciertos hitos. Esta propuesta compite directamente con el interés de Pfizer, que también busca fortalecer su portafolio en el creciente segmento de medicamentos para la pérdida de peso.
La disputa no se ha limitado al ámbito financiero.
En un movimiento agresivo, Pfizer anunció la presentación de una nueva demanda contra Novo Nordisk y Metsera por motivos antimonopolio, llevando la batalla a los tribunales. Esta acción legal busca bloquear o complicar la adquisición por parte de su rival, argumentando que podría generar una concentración indebida en el mercado y afectar la competencia. La pugna por Metsera subraya la enorme importancia estratégica que las grandes farmacéuticas le otorgan al desarrollo y control de nuevas terapias para la obesidad. Este mercado ha experimentado un crecimiento exponencial y se proyecta como uno de los más rentables de la próxima década, lo que explica la disposición de ambas compañías a realizar inversiones multimillonarias y a recurrir a estrategias legales para asegurar una posición dominante.
En resumenLa guerra de ofertas entre Novo Nordisk y Pfizer por Metsera subraya el inmenso valor estratégico del mercado de medicamentos contra la obesidad. La decisión de Pfizer de emprender acciones legales contra el acuerdo pone de manifiesto lo mucho que está en juego, convirtiendo una adquisición competitiva en una batalla legal que podría redefinir el panorama de este sector farmacéutico en rápido crecimiento.