El acuerdo, que tendrá vigencia en todos los países donde BBVA tiene presencia, busca ofrecer una gestión más ágil y eficiente.

Entre los beneficios clave para los clientes se encuentra la automatización de procesos como la conciliación bancaria y los pagos, lo que reduce errores y riesgos de fraude asociados a la gestión manual. Además, se espera una reducción en los costos corporativos y una mejora en la eficiencia operativa al simplificar el intercambio de información financiera. David Arias, responsable de Propuesta de Valor de Banca de Empresas e Instituciones de BBVA, señaló que la alianza es un "paso decisivo para acercar nuestra propuesta de valor a las empresas", simplificando el acceso a sus servicios e integrándose de forma fluida en sus procesos. Para BBVA, esta colaboración abre nuevas oportunidades de negocio, permitiéndole ampliar su oferta y atraer clientes que buscan soluciones financieras optimizadas a escala global, reforzando el negocio de Empresas como una palanca clave en su ciclo estratégico 2025-2029.