Sin embargo, la resistencia es firme.

El consejo de Banco Sabadell se prepara para rechazar por unanimidad la propuesta, calificándola de insuficiente por infravalorar el banco y no reflejar su valor real.

Los accionistas minoritarios han reiterado su rechazo en las condiciones actuales, exigiendo una prima superior al 30 %.

En medio de la tensión, el presidente de BBVA, Carlos Torres, ha declarado que “una segunda opa no está encima de la mesa", descartando futuras mejoras y apostando el éxito de la operación a la oferta actual. Torres se ha lanzado a una campaña para convencer a los gestores de fondos de inversión, buscando asegurar el respaldo necesario para que la OPA prospere. Este movimiento estratégico subraya la complejidad de la fase final, donde la percepción de los analistas permanece dividida y el resultado es incierto, dependiendo en gran medida de la decisión de los accionistas de Sabadell ante la oferta final y la postura inflexible de su consejo directivo.