La disputa legal se intensifica mientras la compañía española anuncia un plan de expansión en Europa. El conflicto por los derechos de la marca "Frisby" en Europa ha escalado a una batalla legal formal. Frisby S.A. BIC, la empresa colombiana, ha dado por terminada la etapa prejudicial exigida por la ley española y, a través de la firma de abogados Garrigues, iniciará las acciones judiciales correspondientes contra Frisby España SL. La controversia surgió cuando la empresa española comenzó a operar utilizando el nombre y elementos visuales similares a los de la marca colombiana. Por su parte, Frisby España ha comunicado oficialmente la ruptura definitiva de las negociaciones, alegando una "falta de avances y de propuestas viables" por parte de la compañía colombiana. Charles Dupont, portavoz de Frisby España, afirmó que su empresa "no está en venta" y calificó la postura colombiana como un "intento de control global sin voluntad real de desarrollo". Tras el colapso del diálogo, Frisby España ha activado un plan de expansión que incluye la creación de una nueva entidad operativa, el cierre de una ronda de financiación y la apertura de 12 puntos de venta. Adicionalmente, ha solicitado ante la Superintendencia de Industria y Comercio de Colombia que su marca europea sea reconocida como notoria en el país. La disputa ahora se centra en los procesos pendientes ante la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) y la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO).