Este pleito fracturó las relaciones comerciales y generó una gran inestabilidad.

Adicionalmente, la empresa enfrentó un entorno de mercado adverso, marcado por una disminución sostenida en la tasa de natalidad en Colombia. Según datos del DANE, en 2024 se registraron un 33,4% menos de nacimientos que en 2014, lo que redujo considerablemente el mercado objetivo para la moda infantil. Actualmente, la compañía no cuenta con empleados vinculados y el proceso se centrará en que el liquidador designado gestione los activos restantes para pagar a los acreedores.