En Bogotá, la programación se extendió durante todo el puente festivo, con actividades gratuitas y pagas para todos los públicos.

La Zona T fue epicentro de su tradicional Desfile de Disfraces, mientras que el Centro Histórico acogió la edición 16 de “Tardeando el Centro”, una iniciativa que unió a más de 40 espacios culturales, gastronómicos y artísticos. La capital también ofreció planes familiares en parques como el Simón Bolívar y ciclos de cine de terror en el Planetario y la Cinemateca Distrital. En Medellín, la agenda incluyó planes en centros comerciales, proyecciones de cine en el MAMM y el “Festival de Disfraces” del Inder. Por su parte, Itagüí celebró su emblemático Gran Desfile de Halloween, reconocido en todo el Valle de Aburrá. Una de las tendencias más notables de este año fue la popularidad de los disfraces inspirados en la cultura pop, especialmente los de “Las Guerreras K-Pop”, personajes de una exitosa película surcoreana que, según los informes, lideraron las búsquedas en Google y arrasaron en ventas, superando a atuendos clásicos. Este fenómeno evidencia cómo las nuevas generaciones, influenciadas por el K-Pop y las plataformas de streaming, están redefiniendo las estéticas de la celebración, viendo en estos personajes “una representación de fuerza, talento y amistad”.