El concierto de Carlos Vives, descrito como una "carta de amor a Santa Marta", fue el evento central de las conmemoraciones del quinto centenario de la ciudad. Durante tres horas, el artista samario ofreció una serenata frente al mar que reunió a una multitud en la Playa de Los Cocos. El repertorio abarcó toda su carrera, con clásicos como 'Pa’ Mayte' y 'La Tierra del Olvido', y culminó con el estreno de su nuevo himno, '500 años', una canción que rinde homenaje a la historia de la ciudad. Este tema, que forma parte de la reedición de su álbum "La Tierra del Olvido" por su 30 aniversario, fue interpretado junto a una nueva generación de artistas samarios como Lalo Ebratt y Bomba Estéreo. Uno de los momentos más simbólicos de la noche fue cuando Gloria Izquierdo, líder del pueblo arhuaco, subió al escenario durante la interpretación de la canción, un gesto que reconoció las raíces indígenas de la región y fue recibido con una ovación. El espectáculo también contó con invitados especiales como la cantaora española Niña Pastori y su sobrina Olga Lucía Vives. Vives aprovechó la ocasión para reflexionar sobre el futuro de su ciudad, afirmando que "el trabajo no se ha acabado. Aún hay que seguir cantando todos los días". El evento finalizó con fuegos artificiales, sellando una noche que el público describió con el coro espontáneo: "¡Se lució, Vives, se lució!".
