El humorista Hassam se vio envuelto en una fuerte polémica tras un altercado verbal con una usuaria en la plataforma X (anteriormente Twitter). La discusión, que incluyó insultos y ataques personales por parte del comediante, generó una ola de críticas sobre el manejo de la imagen pública y la responsabilidad de las celebridades en el entorno digital. El conflicto comenzó cuando Hassam respondió a un comentario de la usuaria Viviana Díaz con un tono despectivo: “Esa no es la manera de pedir plata regalada.
Trabaje, vaga”.
La usuaria replicó haciendo alusión a la enfermedad del comediante, a lo que Hassam respondió con un comentario sobre la fuente de ingresos de ella: “No quiero, no me gusta On.. Fa…”. La tensión escaló con ataques mutuos sobre la apariencia física, culminando con una respuesta de Hassam en la que afirmaba: “Y le gano más que usted sin mostrar el cu…”. El humorista finalizó la discusión publicando una fotografía de la mujer acompañada de una frase ofensiva.
La reacción del público fue mayoritariamente negativa.
Otras usuarias, como Marcela Ruge, condenaron el comportamiento de Hassam, calificándolo de “malos tratos, machismo, grosería y vulgaridad”. Ruge destacó el peligro de que figuras públicas utilicen su viralidad para hostigar a mujeres en redes, señalando que se trata de una forma de acoso digital.
En resumenLa controversia expuso un lado confrontacional de Hassam, llevando a muchos a cuestionar si cruzó la línea entre la defensa personal y el acoso digital. El incidente ha provocado un debate más amplio sobre la responsabilidad que tienen las figuras públicas en sus interacciones en línea y cómo sus acciones pueden ser percibidas como un abuso de su plataforma e influencia.